Mi nombre es Àgueda, con acento abierto en la A. Palabra esdrújula y con mucha fuerza que lleva acompañándome toda la vida. Y siempre he pensado, que mi nombre, por sí solo, ya dice mucho de mí.

Soy de las que creen que todo se arregla con una sonrisa, de las que lloran cuando la abrazan; soy de las que entran en un sitio y saludan aunque no conozca a nadie; de las que cogen un bolígrafo y tienen la necesidad de dibujar y rallarlo todo. Necesito la música en mi día a día, no sé hacer cosas sin «mi banda sonora» de fondo; canto en la ducha y mientras me seco el cabello, el ruido del secador me inspira; soy de las que bailan hasta la última canción por mucho dolor de pies que tenga; me encantan las fresas y todas las golosinas rojas; soy de las que se expresa mejor escribiendo que hablando; de las que valoran los pequeños detalles y son los que más feliz me hacen. Soy de las que ríe fuerte y con ganas.

Soy de las que viviría a base de ver vídeos de animalitos por internet y se emociona; de las que necesita tenerlo todo organizado pero a la vez le emocionan las sorpresas (aunque difícilmente me las pueden hacer, soy una gran detective! Me he criado viendo y leyendo a Sherlock Holmes); soy exageradamente friki, dame una película de Harry Potter, Star Wars, Marvel o DC y soy como una niña pequeña con zapatos nuevos.

Me gusta recordar a la gente que quiero que lo hago, ya sea diciéndoselo o con demostraciones. Os aseguro que todo iría mejor si siempre fuéramos de cara y no nos guardáramos las cosas dentro; soy sincera (demasiado y todo); cuando tengo un mal día limpio y reorganizo cajones y ordeno de forma compulsiva las cosas sin saber por qué y a la vez puedo vivir inmersa en un caos; cuando estoy bien podría comerme el mundo entero.

Adoro el amor de verdad, sincero y puro y todo lo que este conlleva. Soy de las que cree que las amistades son la verdadera familia, porque son aquellas que tú eliges. No soporto ver que un animal sufre y de las que se lleva cualquier bicho perdido a casa; soy de las que tengo suerte para encontrar aparcamiento y los semáforos en verde. Soy de las que sueñan despiertas; soy de las que siempre va con agenda y alarmas a todas partes; soy de las que va por la calle escuchando música y se piensa que todo el mundo la escucha, soy todo eso y mucho más.

Y mezclando todo esto (todo lo que me hace ser quien soy y como soy), se crea el Inefable, mi inefable.